Michael Kors Fall Winter 2011/2012
Quién es esa chica? Es lo primero que me pregunto cuando veo una pasarela de Michael Kors. El viste a la mujer americana por excelencia, socialté, empresaria, con oficinas en park Avenue y una casa de playa en los Hamptons. Tiene un yate, un marido con jet privado, asiste a cuanta fiesta haya que asistir y se siente dueña del mundo pero eso sí, no se complica por nada.
No importa a dónde vaya ella, puede estar en una reunión de negocios como en un día de trabajo cualquiera.
Que se vaya a un cocktail.
De vacaciones a los Alpes.
Que pase un día en familia.
O que se vista para un día cualquiera.
Michael Kors viste a todas las mujeres (y las que no, sí que nos da buenas ideas!), a las más exitosas y a las que aspiran a serlo, no por un derroche de glamour sino por la seguridad que ella exuda. Este año, el diseñador cumplió 30 años de trabajo en la industria, y lo celebró con una colección que le rinde culto a estas últimas décadas así como a las piezas que ha convertido en su sello. Sweaters de casheme, tejidos gruesos, abrigos largos, capas y ponchos. Con una paleta neutral, los grises, negros, beige y marrones fueron los protagonistas bajo un esquema monocromático en piezas alargadas, pulcras con líneas elegantes y precisas. El objetivo? Hacer que la mujer se vea lo más esbelta posible.
Su guardarropa no es gigantesco, es inteligente. Blusas blancas, faldas negras, trajes de dos piezas, abrigos a la rodilla, vestidos negros y túnicas. La clave acá es la calidad de los tejidos y las telas, una caída perfecta y un cuerpo que, qué puedo decir…hay que hacer ejercicios!
Sin complicaciones. Los complementos son los necesarios. Un moño medio suelto tirado para atrás, maquillaje básico y detalles metálicos para agregar el toque justo de locura. Una locura relativa porque ella sabe lo que hace.
Cada colección, Kors reinterpreta el concepto de Ready-to-Wear para hacerlo haciéndolo tan personal como de todas. Porque no creo que haya mujer que no quiera algo de esta colección que literalmente, es para todas. Ideas? Está de más decírtelas, cada una sabe lo que tiene en su clóset y que le falta para armar cada una de estas propuestas, bajo tu propia perspectivas, con tus propias armas.